http://palomontenegro.blogspot.com/2011/03/las-sectas-fe-fanatismo-y.html
CARTA DE ANA( ana goico indakeshalaken@yahoo.es )
Buenos días Rey. Hemos leído tu entrada en el blog, bueno, más bien, el blog entero. Es muy interesante, das respuesta a muchas inquietudes y dudas que he estado teniendo desde hace tiempo con todos estos temas. Verdaderamente la ayuda que pedía llegó contigo... Coincidimos en todo en general. Como te decía yo me dedico al Yoga desde hace bastantes años, y en este tiempo sí que he visto ese tinte sectario y he tenido ofertas de todo tipo para pertenecer a determinados grupos "especiales". Y también personas que transforman la esencia de las enseñanzas originales, con el fin de darle otro toque más occidental y comercial y sacar mayor provecho económico. Más vale que a mí me gusta ir por libre, o no sé, puede que fuera porque mi intuición está clara, pero el caso es que sí que estoy muy atenta más a las obras que a las palabras, y ahí es donde capto la incoherencia de las cosas y me ayuda a decidir.
He aprendido que es muy importante relativizar las cosas, no dejarse llevar de la emoción ni del ego y creer que se es "algo grande" sólo por el hecho de haber vivido determinadas experiencias, o haber nacido con ciertos dones poco comunes. En la Vida todo tiene un sentido profundo, no existe el azar ni la casualidad y nosotros debemos vivir lo que nos toque con apertura de mente, de corazón y tambíen cómo no, con gran atención, porque la línea que separa la ilusión de la Verdad es muy fina.
De todos mdos, sí que tengo una duda sobre algo que comentas en esta última entrada. Es acerca de la dificultad de abandonar una secta cuando se está ya en ella. Dices que en el Palo o la Santería es fácil, con cambiar de padrino ya está hecho. Yo veo que el problema es un poco más sutil. No se trata de cambiar de padrino solamente, sino de abandonar. Imagínate a alguien que se rayó o que se hizo santo (o ambas cosas) y ve con la experiencia que ese no es su camino. Se plantea un problema serio para la persona, porque entran en juego temas de miedos y superstición, la sutil amenaza de que algo terrible te puede ocurrir por el castigo de los muertos o la maldición de "los santos" (que no son santos...), de que entres en osobo de por vida y no camines, o cosas peores... Pienso que es más peligroso si cabe que una secta convencional porque en las sectas, de alguna forma se puede distinguir físicamente al responsable principal que puede querer atraparte y perjudicarte, pero en el caso de los cultos afroamericanos se habla de otra cosa, de seres espirituales que pueden "vigilarte" y amargarte de por vida en todo tiempo y lugar. No sé si lo he entendido mal, pero veo que no es tan fácil como lo has expresado. Sí es fácil en el caso de una persona que simplemente se consulta, pero no para quien esté rayado, bautizado... y "pertenezca" a la religión. Esa persona podrá fácilmente cambiar de casa, pero ¿abandonar del todo?, no es tan fácil.
Hay una forma muy clara de dominio de los adeptos a través del miedo, como en cualquier secta y/o religión organizada y es en este caso, por ejemplo, con la cantidad de prohibiciones que hay en la santería. Esto lo expresas muy claramente en tu blog cuando afirmas lo siguiente:
Todos los mpungus, tótems, espíritus, fuerzas y divinidades elementales que la humanidad ha nombrado, adorado y manipulado a lo largo de la historia, son entidades simbólicas que representan distintos aspectos de los cuatro elementos y su relación con los seres humanos. Son clasificaciones creadas por la imaginación humana que permiten a los brujos, magos y chamanes sintonizar su propia energía con la frecuencia energética precisa de determinados aspectos de los cuatro elementos para producir ciertos efectos o cambios específicos en la realidad inmediata. Por esta razón, los Nuevos Kimbisa no tienen ningún reparo en utilizar en sus trabajos y rituales espíritus o fuerzas provenientes de diferentes cultos, ya que no les consideran dioses a los que haya que jurar fidelidad, sino avatares locales de elementos universales.
Los avatares se van transformando con el tiempo o pasan de moda y van cayendo en el olvido a medida que la realidad y las prioridades humanas van cambiando. Eso prueba que no son entidades antropomórficas sino códigos simbólicos creados por el hombre para manipular la energía espiritual presente en los elementos naturales y alinearla con las fuerzas equivalentes que conforman al individuo( los huesos y tejidos son equivalentes a la Tierra, la sangre, lágrimas, el líquido amniótico y demás líquidos del cuerpo equivalen al Agua; la respiración y el pensamiento son equivalentes al Aire y la energía sexual y la fuerza vital equivalen al elemento Fuego ) para activar y emplear determinadas vibraciones de la energía consciente universal o Espíritu.
Y ante eso, me pregunto hasta qué punto es real o mental? hasta qué punto a un santero le puede pasar algo "malo" si come calabaza, coco o gallina, por nombrarte algo...
En fin, espero no causarte molestias con estas dudas mías. No es mi intención. Gracias de nuevo por todo.
Un abrazo,
Ana.
RESPUESTA DE MONTENEGRO:
Estimada Ana: Ante todo gracias por el interés en mi blog, es un gran estímulo para mi.
Quiero insistir en el hecho de que ni la santería ni el palo monte son sectas y mucho menos peligrosas. Y no lo digo porque sean disciplinas que yo practique, sino porque el estudio y el tiempo que les he dedicado durante tantos años me llevan a esa conclusión que, dicho sea de paso, es compartida por otros investigadores y antropólogos, personas imparciales cuyo interés por estos temas es solo intelectual y profesional, no religioso.
La santería y el palo monte son religiones y cultos eminentemente prácticos, cuya función principal es ayudar a las personas a prosperar y ser felices en el mundo terrenal mediante la armonía con el mundo espiritual. Si un iniciado en estas disciplinas no ve resultados o avances considerables en su vida, está en todo su derecho de consultar a otro padrino o de abandonar la religión. Esto es algo que ocurre constantemente y ningún santero, babalawo o palero utiliza técnicas de lavado de cerebro, intimidación, secuestro o castigos para retener a sus ahijados, como sucede en las sectas religiosas que menciono en mi artículo. De hecho, en la santería existen rituales específicos para que las personas puedan deshacerse de sus santos y abandonar la religión sin perjuicio para su vida y su desarrollo.
La santería y demás cultos afrocubanos son de las pocas religiones en el mundo que demuestran una gran tolerancia religiosa al permitir que sus seguidores cultiven a la vez otras religiones y disciplinas esotéricas. se puede ser santero, palero o abakuá y al mismo tiempo ser francmasón, rosacruz, espiritista, católico, budista, etc. Yo mismo soy el más claro ejemplo de esta verdad.
Tu mencionas el miedo y la superstición como elementos que hacen titubear a la gente que desea abandonar la santería o el palo monte, y es cierto, pero debes tener en cuenta que dichos elementos existen solo en la propia mente de la persona y no en la religión en sí, ya que en ningún libro o tratado de los cultos afrocubanos se afirma categóricamente que le vaya a pasar algo malo a quién busca otros caminos espirituales. Lo que si dicen es que aquél religioso practicante que no sigue correctamente los consejos de sus santos y guías espirituales es propenso a cometer errores y pagar las consecuencias.
En mi opinión, si un iniciado cree que su padrino no le está ayudando debe consultarse con otra persona y si, después de mucho buscar, no encuentra a nadie que le ayude de verdad y pierde la fe en esa religión, está en todo su derecho de buscar otros caminos y nada malo le sucederá.
Es muy sencillo, se cree o no se cree. Si el creyente no cree en su religión porque no ve avances en su vida ¿porqué razón iba a temer abandonarla, si está convencido de que no funciona?
Además, tanto en la santería como en el palo monte, cuando uno se inicia del todo, es decir, corona santo, hace Ifá o se convierte en tata, inmediatamente deja de depender de sus padrinos. A partir de ese momento puede consultar por si mismo a sus deidades, estudiar los tratados secretos, desarrollar su propia experiencia y ayudar, según su criterio, a otras personas.
Como ya he dicho antes, en temas religiosos y espirituales todo depende de la mente individual y de la cultura y experiencia acumuladas en dicha mente. Para mi esos miedos de los que hablas son irrisorios( sin ánimo de ofender ), porque he estudiado lo suficiente sobre estos temas como para interpretar de forma más profunda los simbolismos mágicos; pero entiendo perfectamente que otras personas, con menos conocimiento y experiencia transformen su desinformación en dudas y estas en miedos. Recuerda que los humanos siempre tememos aquello que no conocemos o entendemos. Si se estudia, se conoce y se entiende, se elimina las dudas poco a poco y los miedos desaparecen por si solos.
En cuanto a las prohibiciones presentes en la santería a las que haces referencia, debes entender la diferencia radical que tienen en comparación con los tabús de otras religiones. Los tabús de la santería no son prohibiciones basadas en mandamientos y prejuicios morales, como en las religiones judeo cristianas y musulmanas. Los tabús de la santería tienen una explicación más practica. Por ejemplo: el tabú de no comer calabaza es solo para determinados hijos de Oshún a los cuales se les advierte que, como la calabaza pertenece simbólicamente a Oshún, no debe comerla para que cuando tenga un problema grave, Oshún pueda salvarle mediante un ebbó con calabaza. Así de simple. No se les obliga, ni se les mira mal por incumplir estos tabús. Cada cual hace con su vida lo que quiera, es uno de los principios de las religiones afrocubanas. Conozco a muchos santeros que incumplen a cada paso algunos o todos los tabús que le marca su letra y no viven preocupados por ello.
Tomar a pie juntillas, sin analizar, todo lo que nos dicen, es síntoma de fanatismo. Es normal que al iniciarse en algo, la persona sea muy cuidadosa y cumplidora con todos los detalles, porque está aprendiendo; pero una vez que acumulamos experiencia y conocimiento podemos adaptar cada concepto a nuestra propia naturaleza y criterio y desechar lo que nos parezca superfluo. Las personas que cuestionan sin saber y sin esforzarse en profundizar sus conocimientos, son susceptibles de ir pasando de una fe en otra sin nunca acabar de sentirse cómodos en ninguna. Como ya he dicho, el camino espiritual es difícil y el que no esté dispuesto a esforzarse nunca hallará su meta.
Para terminar con este tema, me gustaría aclararte, en referencia a ese comentario tuyo sobre que los santos de la santería no son santos, que se les llama popularmente santos a las divinidades yoruba a causa del sincretismo con la religión católica, pero que, en realidad, nada tienen que ver con los santos del panteón católico y las personas que cometen el error de confundirlos lo hacen por desconocimiento, ya que los orishas no son ni remotamente tan puritanos y mojigatos como los santos católicos.
Personalmente, prefiero el palo monte a la santería, porque la santería es una religión y, como tal, son sus divinidades las que le dicen al iniciado lo que debe hacer; mientras que en el palo monte, culto chamánico, más que religioso, son los practicantes quienes le ordenan a sus aliados espirituales lo que desean.
Y por último, quiero aclarar que el texto que citas lo escribí basándome en información sobre Los Nuevos Kimbisas, fenómeno resiente dentro de la cultura espiritual afrocubana, que poco tiene que ver con la regla Kimbisa del Santo Cristo del Buen Viaje; regla esta última que sí tiene más de cien años de fundada y es mucho más conservadora. Los Nuevos Kimbisa, en cambio, son un grupo con ideas, interpretaciones y aplicaciones muy modernas sobre la espiritualidad y lo esotérico. Ver: http://palomontenegro.blogspot.com/2010/11/la-nueva-regla-kimbisa-los-herederos-de.html
Para terminar con este tema, me gustaría aclararte, en referencia a ese comentario tuyo sobre que los santos de la santería no son santos, que se les llama popularmente santos a las divinidades yoruba a causa del sincretismo con la religión católica, pero que, en realidad, nada tienen que ver con los santos del panteón católico y las personas que cometen el error de confundirlos lo hacen por desconocimiento, ya que los orishas no son ni remotamente tan puritanos y mojigatos como los santos católicos.
Personalmente, prefiero el palo monte a la santería, porque la santería es una religión y, como tal, son sus divinidades las que le dicen al iniciado lo que debe hacer; mientras que en el palo monte, culto chamánico, más que religioso, son los practicantes quienes le ordenan a sus aliados espirituales lo que desean.
Y por último, quiero aclarar que el texto que citas lo escribí basándome en información sobre Los Nuevos Kimbisas, fenómeno resiente dentro de la cultura espiritual afrocubana, que poco tiene que ver con la regla Kimbisa del Santo Cristo del Buen Viaje; regla esta última que sí tiene más de cien años de fundada y es mucho más conservadora. Los Nuevos Kimbisa, en cambio, son un grupo con ideas, interpretaciones y aplicaciones muy modernas sobre la espiritualidad y lo esotérico. Ver: http://palomontenegro.blogspot.com/2010/11/la-nueva-regla-kimbisa-los-herederos-de.html
Espero que haya conseguido resolver, al menos, algunas de tus dudas e inquietudes y de otros lectores también.
Saludos,
Montenegro
Saludos,
Montenegro