El Opus Dei y el Franquismo. |
Fundamentalistas islámicos. |
Nazis e Iglesia. |
A lo largo de la historia veremos repetirse esta formula una y otra vez; incluso en nuestros orígenes prehistóricos vemos como la figura del chamán tiene un peso decisivo en la opinión tribal a la hora de decidir sus alianzas y guerras con sus vecinos, así como los tabúes en los cuales basaban su estructura social y las reglas de convivencia. Todas las culturas esclavistas de la antigüedad se fundamentaron en el poder de los dioses, coexistiendo, por lo general, la función de sacerdote con la de gobernante en una misma persona; recurso que se siguió usando durante el medioevo en la figura de los Papas-Reyes y la oportuna creencia en que la sangre de la nobleza es descendiente de la sangre de Cristo.
Secta Evangelista. |
Gran encuentro evangélico. Histeria colectiva. |
Desde que el ser humano tomó consciencia del aspecto espiritual de su naturaleza y comenzó a desarrollar sus capacidades en ese sentido, siempre han existido listos que se han percatado de las ventajas socio económicas y políticas que se pueden obtener de la manipulación egoísta de la espiritualidad de las personas. Y es en ese preciso momento, en los albores de la civilización, cuando lo espiritual se quebró en dos partes en pugna: la espiritualidad luminosa o magia blanca y la espiritualidad egoísta o magia negra; hemisferios opuestos que han seguido difuminándose hasta nuestros días, hasta el punto de que a veces, sobre todo cuando damos nuestros primeros pasos en el mundo espiritual, no sabemos distinguir con certeza donde acaban las sombras y comienza la luz.
Exorcismo real de Anneliese Michel en el seno de una familia católica. |
Mormones. A menudo las sectas se ocultan tras la más pura e ingenua de las apariencias. |
Pervertido y líder de la secta "Los Niños de Dios", autor de numerosos abusos sexuales a menores. |
Boda polígama. |
Secta Harekrishna. |
Secta hinduísta en Granada. |
Sai Baba, controvertido gurú hindú con miles de seguidores en todo el mundo. |
La principal razón por la que tanta gente cae en este tipo sectas es el hecho indiscutible de que la práctica del yoga y la meditación pueden ser realmente beneficiosos para la salud, el desarrollo mental del ser humano y su mejor funcionamiento en el mundo material y cotidiano. Al igual que las sectas cristianas tergiversan la verdadera y hermosa doctrina del Cristo para aprovecharse de sus seguidores, muchas sectas de origen hinduísta y budista alteran el entrenamiento sicofísico del yoga y la meditación y otras técnicas, para manipular en su provecho la conducta de sus discípulos.
Símbolos satánicos. |
Misa satánica. |
El famoso Charles Manson, líder de "La Familia", secta que cometió varios asesinatos. |
Y por último, están las nuevas sectas que mezclan espiritualidad con aparente modernidad, envolviéndose en un aura de superioridad intelectual, que se basa en teorías seudocientíficas y generalmente tachan de anticuadas y primitivas a todas las demás religiones y disciplinas espirituales clásicas. Es el caso de la Cienciología, la Sociedad Etérea, el movimiento Raeliano, la Iglesia de los Subgenios, etc, que mezclan conceptos científicos, la creencia en seres extraterrestres y técnicas sicológicas y de auto superación para atraer y convencer a sus adeptos. Son sectas recientes, que empezaron a surgir, después de la Segunda Guerra Mundial, en países altamente desarrollados como Canadá, Francia, Estados Unidos y Reino Unido. Son religiones de diseño para occidentales de clase media que sueñan con hacerse ricos y triunfar en la vida mediante carísimos cursos y conferencias que recuerdan mucho a esas otras sectas que son las compañías piramidales, como Anway y Herbalife, que ofrecen técnicas de marketing multinivel para, supuestamente, obtener grandes beneficios económicos a corto plazo, pero que en realidad son estafas muy bien montadas.
La secta de la Cienciología utiliza la imagen de famosos para atraer seguidores. |
Celebración de la la Iglesia de la Cienciología. |
Secta Raeliana. Adoradores de extraterrestres. |
Chamán de Alaska. |
Chamán africano. |
Chamán del Amazonas. |
Existen dos peligros en la santería, el palo monte y demás reglas esotéricas afroamericanas: Uno es que nos toque un padrino "descarado", es decir, un estafador que realmente no está iniciado y/o capacitado correctamente para ayudar y enseñar a nadie. Para evitar a esos farsantes lo mejor es informarse bien previamente, buscar padrinos con prestigio y años de experiencia comprobables, visitar a varios brujos y comparar antes de decidirse y ponerlos a prueba en pequeños trabajos que no impliquen un gran gasto. Yo aconsejo que si en la primera consulta el brujo no nos sorprende con sus aciertos o comete varios errores, hay que buscar a otro y si en el primer trabajo que le encarguemos_ un sencillo despojo o trabajo para abrir los caminos_ no vemos resultados firmes a corto plazo, también hay que dejarlo. El otro peligro es que nos toque un brujo malo, es decir, un brujo con poder, pero que lo usa más en su propio beneficio que en el de sus ahijados. Si al poco tiempo de estar siendo atendido por un brujo o sacerdote, las cosas comienzan a ponerse peor, aléjese lo más posible y váyase a consultar con otro, porque probablemente su padrino le ha hecho brujería para que las cosas le vayan mal y tenga que gastar más dinero pidiéndole ayuda. En ambos casos es como cuando buscamos un abogado, a un agente de bolsa o a un médico bueno; no hace falta saber derecho o medicina para distinguir la calidad de la chapuza, tan solo hace falta ir despacio, con cautela y suma atención a los detalles.
Babalawo cubano. |
Brujo palero cubano. |
Los buenos brujos y chamanes suelen ser personas sencillas, indiferentes a los lujos y amantes de la naturaleza y del silencio; con evidentes conocimientos sobre plantas, animales, enfermedades, el clima y los conflictos humanos; personas fuertes y vitales que nunca se quejan, ni pierden los estribos; con mucha sicología natural, carisma y que viven en armonía en todo momento con su entorno, como si formaran parte del paisaje. Y todos saben y disfrutan haciéndolo, cantar y contar historias. Si se topa con uno así, aunque viva en una choza y vista con harapos, no lo deje escapar por nada del mundo.
La búsqueda espiritual es una reacción natural a ciertas inquietudes, como un ansia inefable, que experimentan todas las personas, tarde o temprano, a lo largo de su vida. El problema estriba en que, como sucede con todo en este mundo, cuando surge una necesidad inmediatamente aparecen productos para saciarla, personas que los producen y abastecen y muchos imitadores, especuladores y estafadores. Hay que aprender a elegir y comprar bien, incluso nuestras creencias, porque vivimos en una sociedad consumista dónde cada deseo o inquietud es susceptible de transformarse en artículo de venta. A millones de personas en el mundo les gusta el ginseng; es una necesidad y un producto. ¿Quién cree usted que prueba el mejor ginseng del mundo y al menor precio? Aquél que lo cultiva, desde luego; y después le siguen los compradores al por mayor, más adelante los distribuidores, que pagan un poco más; los vendedores que pagan más todavía y, por último, está el cliente final, los consumidores, que son quienes más pagan por un producto que ha pasado ya por muchas manos, perdiendo frescura y siendo adulterado y rebajado con otras sustancias. Lo mismo sucede con la espiritualidad. Para encontrar un buen maestro y un buen camino es importante acercarse lo más posible a la fuente, porque lo que nos llega a través del mercado espiritual viene muy adulterado y muchas veces es totalmente falso o, peor, está pasado y nos puede hacer daño, como las sectas.
Para acercarse a la verdad hay que arrancar los frutos directamente de la mata; buscar lo auténtico y viajar y escarbar, si es necesario, para encontrarlo. La espiritualidad no es algo que podamos comprar en una tienda o en una iglesia. En esos lugares podemos encontrar información, familiarizarnos con determinadas disciplinas y aprender algunas técnicas, pero la auténtica espiritualidad es un proceso interior al cual solo podemos ascender por nuestros propios medios y de forma individual; ningún maestro nos la puede dar, tan solo indicarnos el camino y mostrarnos su propia experiencia que, aunque se parezca, nunca será igual a la nuestra. Las puertas se pueden abrir, pero nadie puede cruzarlas por nosotros.
El consumismo es otra forma de fanatismo. |
Siddharta Gautama. |
Jesucristo. |
Debemos tener fe en nuestros instintos e intuiciones, en esa extraña e inexpresable sensación que es la llamada espiritual, la voz interior que nos habla, ese trozo de dios que habita en nuestro interior y que nadie puede falsificar o adulterar porque lo llevamos dentro y sabemos que es real. Pase lo que pase no debemos perder esa fe, pero nunca confundirla con la fe ciega e ignorante que reclaman tantas religiones y gurús, porque se esa es un fe falsa, basada en una interpretación de la espiritualidad realizada por seres humanos, mortales, imperfectos y falibles, como cualquier otro. Esa falsa fe no es más que la esperanza y la desesperación de las personas manipuladas mediante promesas de luz, perdón y riqueza. Esa falsa fe es el reflejo irracional del miedo al dolor, al sufrimiento y a la muerte, explotado por los farsantes y los fanáticos religiosos para dominar, sacar provecho y reafirmar sus propias creencias.
Por esa razón, por esa fe, por ese miedo irracional a la muerte y a la vida es por lo que tantas personas caen como moscas en las redes de las sectas y el fanatismo, no solo religioso, sino también político, social y comercial. La mayoría de la gente es fanática de algo o de alguien; fanática de ciertas marcas, de ciertas estrellas y artístas, de internet, de la moda y la apariencia, del sexo, del dolor, del alcohol y las drogas, de ir de compras y de miles cosas más. Todo el mundo acalla su miedo con alguna cosa y por cada cosa hay un producto, un mercado, una oferta que alimenta nuestra tendencia natural al fanatismo a través de publicidad y técnicas de marketing que también son empleadas por religiones y gurús. Estamos tan acostumbrados a pagar por todo que vemos lógico que los curas nos cobren por la vida eterna y los swamis por alcanzar el Nirvana.
El fanatismo y el engaño es el precio que realmente pagamos por no esforzarnos en estudiar, razonar y avanzar con luz propia; es el precio que pagamos por no enfrentar nuestros miedos.
La espiritualidad es, en última instancia, aprender a vivir con libertad y a morir sin miedo; es aprender a encontrar belleza y armonía en medio de la tragedia humana; es aprender a vivir el presente, cada instante con intensidad; es ser capaces de ayudar, envés de dañar; de crear, envés de destruir; de dar, envés de pedir; de arriesgar la vida por otro ser, envés de huir o pasar de largo; es ser capaces de sintonizar con el entorno; de sentirnos parte de la naturaleza y no sus dueños. Cuando se vive de ese modo y se estudia y se razona con libertad y criterio lo que hacemos, la magia no tarda en encontrarnos y los milagros comienzan...
3 comentarios:
Hola buenos días, en este foro http://www.santeriatoday.com/ le han copiado un artículo de su blog aquí le dejo el enlace :
http://www.santeriatoday.com/profiles/blogs/espiritu-jibaro-la
Excelente artículo!!!!
gracias por la rigurosidad y ser tan claro en exponer un tema tan controversial.
Eduardo.
El último párrafo me lo llevo y lo publico en facebook, con su permiso...
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